El problema de hoy es algo que me ha estado rondando la cabeza estos días, después de que el twitter de los escritores Ana Alonso y Javier Pelegrín (La Llave del Tiempo, Fuego Azul, Tatuaje...) mostrara un artículo que un periódico angloparlante publicó con las razones que hacen que los chicos de hoy lean menos que las chicas. Reconozco haber querido leer el artículo, pero aún no lo he hecho. En cambio, voy a poneros mi opinión sobre el tema.
En primer lugar, qué más voy a decir que yo soy un chico y leo más que cualquier chica que conozca en persona (no así en la blogosfera), con lo cual ya puedo estar un poco en contra de la generalización, más allá aún de que yo siempre he estado en contra de las generalizaciones. El día en que cada encuesta que hagan me pregunten a mí y a absolutamente todas las personas que conozco, empezaré a creer un poquito (y sólo un poquito) en ellas. Porque, ¿cómo saben a ciencia cierta que las chicas leen más?, ¿apuntan el sexo de la gente que compra literatura juvenil?, conmigo creo que no lo han hecho nunca, más que nada porque me daría miedo que la librera (que ya me conoce) apuntase mi sexo en cualquier papel. Bueno, partamos del punto de que en las encuestas que hayan hecho, las chicas jóvenes leen más que los chicos jóvenes.
Pues bien, vamos con los motivos. Para el primero no tenemos más que mirar el catálogo de cada mes de literatura juvenil. En él encontramos las típicas novelas para chicos y chicas de unos catorce años, en las cual el género de los protagonistas importa más bien poco. Pero, por otra parte, tenemos lo que parece ser el pan nuestro de cada día desde que el fatídico Crepúsculo vio la luz. Vamos con el argumento de la gran mayoría de novelas juveniles actuales (para gente de entre 16 y veintipico):
_____ (nombre raro y molón) es una chica que no comprende al mundo/incomprendida. Amante de la soledad y la naturaleza. Nunca ha conocido a ningún chico importante, pero, tras mudarse de casa al pueblo natal de su madre/padre/tíos lejanos (esto último es opcional), conoce al enigmático y atractivo _____ (nombre masculino con fuerza y misterio). Por una parte, el chico parece corresponderla, pero por otra, parece dispuesto a matarla. Y es que, ____ (el chico molón) es, nada más y nada menos, que ¡un vampiro/hombre lobo/ángel/cazador de demonios/miembro de la SGAE! Pero _____ y _____ no están dispuestos a dejar atrás su amor, cosa que su clan de vampiros/hombres lobo/el ejército angélico/los cazadores de demonios/Teddy Bautista no están dispuestos a permitir.
Y bien, qué queréis que os diga, pero yo escuchar una historia de amoríos adolescentes desde el punto de vista única y exclusivamente de ella no me atrae para nada. Entonces, ¿leen los chicos menos porque tienen menos que leer, o tienen menos que leer porque no merece la pena hacer libros para un colectivo que tan poco lee? Yo qué queréis que os diga, he leído maravillas desde el punto de vista femenino y con historias de amor preciosas, pero siempre una historia de calidad y no sólo la calentura de un sucedáneo de Stephenie Meyer, y con una historia en la cual exista tal historia de amor, no el hecho de que el hilo argumental sea una mera excusa para vendernos estas fantasías calenturientas. Claros ejemplos son Graceling, Los Juegos del Hambre, e incluso Cazadores de Sombras, libro que tiene algunas características más del estilo de lo anteriormente criticado, aunque con un hilo argumental buenísimo y una calidad superior.
Podréis decir que sí, que ahora todas las protagonistas de libros son chicas. Pues bien, eso no tiene que ver. Puede hacerse una historia, incluso una historia de amor, con punto de vista femenino, y gustar a los chicos. ¿No os gusta Harry Potter a muchísimas chicas?, pues al contrario también pasa. Véanse Laila Winter, Traición, Los Cien Mil Reinos...etc
Y que no os vendan el que al 100% de los chicos no nos gustan las historias de amor. Personalmente, a mí me encantan. Qué decir que una de las novelas que más me han gustado de los últimos años ha sido La Chica del Lago, historia dramática y de amor de una calidad excepcional, narrada con los puntos de vista tanto de ella como de él. Otro libro que me ha encantado ha sido Soy el Número Cuatro, y aunque su historia de amor era bastante anodina, sobre todo comparado con toda la historia de Lorien, ha sido bastante agradable, y desde el punto de vista de él. Que esa novela haya tenido éxito implica que a ambos sexos les pueden gustar historias de amor narradas por el género contrario, pero, repito una vez más, de calidad.
A ver si esta moda pasa pronto y empiezan a hacer más libros con temática un poco más unisex. Hasta entonces, he de decir que tampoco me quejo con la cantidad de libros que puedo leer de temáticas un poco menos crepusculeras. ¡Nos vemos!
Buenas ^^
ResponderEliminarMe parece interesante el debate que planteas. Voy a ir por partes :P
A mí Crepúsculo sí me gustó mucho. Reconozco que hay libros mucho mejores, con mejores tramas y personajes, pero bueno, creo que cumple con su cometido, entretener.
Sí que creo que desde Crepúsculo, las editoriales han buscado historias similares a esta obra (por no decir clavadas, en ciertas ocasiones). Es lo típico, algo se pone de moda y lo potencian hasta la saciedad. El problema viene con que, si bien hay chicos que como tú leen historias de amor, también los hay que no. Y chicas que huyen de la peste de novelas romanticonas también, claro. Al potenciar sólo esas novelas, dejan a muchos lectores (chicas y chicos) fuera y eso no está bien. Que saquen a la venta más variedad (siempre moviéndonos dentro de lo juvenil, que creo que es desde donde has planteado el debate, si no estoy equivocada).
A ver si llega el día en que haya muchas novelas de todo tipo y la gente se anime a volver a leer, o simplemente siga leyendo :]
Muá.
Me encantó el tema. Es cierto, últimamente se relaciona la literatura juvenil con la romántica juvenil y las historias empiezan a agortarse. Pero también hay mucha fantasía épica y terror para los varones. De igual modo, así como la estoy planteando la clasificación es sexista, porque hay varones que leen romántica y mujeres que leen épica fantástica.... Estarán las obras destinadas a otro tipo de publico menos publicitadas?
ResponderEliminarYo creo que pasa algo similar con la industria de los videojuegos. La mayoría de los juegos de hoy en día se promocionan para varones, los de disparos, zombies, soldados, terror, fantasía épica.... muchas chicas los jugamos, pero el principal consumidor es el varón, y las promociones van dirigidas a ellos más que nada...
Yo creo que es un tema de promoción, se enfocan en los públicos cautivos de cierta clase de historias o de juegos y desarrollan para ellos, saturan el mercado cuando está en auge, porque saben que son modas que durarán poco y quieren aprovecharlas. Por debajo, discreta y tranquilamente, el resto de los lectores tiene una oferta más reducida, pero de mejor calidad. Por lo menos eso quiero creer yo!!!!
Y por cierto: yo tampoco leí crepúsculo, y ahora estoy empezando con Laila Winter. Amo a Pratchett, es para todos los géneros, inténtalo!!!
Qué razón tienes.
ResponderEliminarYo leí ese artículo también gracias al twitter de Ana Alonso, y pensé exactamente lo mismo. Tanta novela juvenil romántica que se centra SOLO en un amor empalagoso cansa, y cuando son el 80% de las novedades juveniles... ¡normal que muchos chicos lean menos!
A mí también me han gustado libros de este estilo (sin ir más lejos, en su día Crepúsculo me gustó mucho), pero a veces me gustaría que hubiera algo más de variedad en los catálogos. Por eso me gustan tanto sagas como LJDH o CdS: como tú dices tienen estos elementos, pero la calidad es mucho mayor.
A ver si nos llegan más novelas "unisex" próximamente...