Reseña de "Incarceron", de Catherine Fisher

Título: Incarceron

Autora: Catherine Fisher

Serie: Incarceron (1 de 2)

País: Inglaterra

Año: 2010 (en España)

Editorial: Molino

Precio: 16€

Páginas: 512

Género: Distopía

Sinopsis: Imagina una prisión tan grande que contiene celdas y galerías, bosques, ciudades y mares. Imagina un prisionero sin recuerdos. Imagina una joven condenada a un matrimonio pactado y viviendo en una sociedad donde el tiempo se quedó anclado en el siglo diecisiete y que está vigilado por unos sofisticados seres de inteligencia artificial y robot. Incarceron es la prisión, Finn es el preso y Claudia vive fuera, en ese extraño mundo donde nadie sabe nada de Incarceron. Pero ¿qué pasaría si Claudia consiguiera un día comunicarse con Finn a través de un extraño cristal y estos empezaran a compartir algo más que amistad?

Mi Nota: 9

En tres palabras: Distópico, interesante, ameno.

Empiezo esta reseña con una carta de despedida, unida a un testamento. ¿Por qué?, porque cuando Barnsdale11 lea esto, mi muerte estará sentenciada. En unos días se presentará ante mí y me matará a librazos. Seguramente me mate usando este libro, ya que es muy gordo y así quizás lo odie, en vez de tenerlo en la estima en que lo tengo.

Me habían advertido. Me dijeron que este libro era horrible, que estaría tirando el dinero. Sin embargo, a mí me encantaba la portada y el argumento prometía. Me dijeron que no era tan ciencia ficción, que tenía toques de fantasía que no le quedaban nada bien. Eso no hizo sino hacer que le tuviese más ganas, pues la mezcla entre fantasía y ciencia ficción siempre me ha gustado. Entonces llegó la noticia de que Incarceron llegaría a las librerías españolas, y lo haría nada menos que con Molino, la editorial que nos trajo Los Juegos del Hambre. ¿Qué más se podría pedir? Por el momento nada, aunque cuando llegó la fecha y el libro estaba más desaparecido que Bin Laden, sí que hubiera pedido que alguien dijese qué pasaba.

Aún así, no desistí, y un día como otro cualquiera, encontré en mi librería habitual una gran llave brillante. Lo primero que pensé: ¡Por fin ha llegado!, lo segundo: ¡qué gordo!, lo tercero: el brillo a la portada no le queda tan bien realmente. Lo cuarto: pues para lo gordo que es, no ha sido tan horriblemente caro.

Ese mismo día no pude leer, pero al día siguiente ya me había acabado el libro que estaba leyendo en esos momentos. Estaba en una época de no comprar y leer libros que tenía atrasadísimos en la lista de espera, pero me dio absolutamente igual y lo colé igual que hacen las señoras en la cola del súper.

El libro empezó interesante. No enganchaba hasta morirse, pero me resultaba ameno. Sí, ameno, todo lo contrario de la fama que tiene el libro. Esto es un misterio sin resolver, pues para mí los libros tienen que ser MUY amenos de leer o van al rincón de las lecturas abandonadas, no estamos para atragantarnos con ningún tocho que no se deje leer. Lo estaba disfrutando muchísimo, pero entonces recordé las advertencias de Barnsdale11: es un libro aburrido, llegará el momento en que no puedas seguir avanzando. Pero el momento no llegaba y cuando me di cuenta ya me había leído más de medio libro.

Si la historia era bastante entretenida al principio, se fue haciendo más y más conforme pasaban las páginas. No estaba enganchado como para no despegarme del libro y leer y leer sin darme cuenta, pero sí que estaba muy intrigado e interesado con saber qué pasaba al final del libro.

La historia me ha recordado a un montón de cosas (casi todas ellas buenas). En primer lugar, me ha recordado a Airman, de Eoin Colfer (curiosidad: El protagonista de Airman se llama Conor Finn, y el de Incarceron, Finn). En segundo, a la típica distopía en la que los protagonistas están encerrados en un lugar enorme y muy extraño (y peligroso). Y todos sabemos que me ENCANTA ese tipo de lecturas. En tercer lugar, me ha recordado a un juego de rol. No a uno en concreto, sino a uno cualquiera. Los protagonistas forman un grupo de viajeros que van recorriendo caminos, unos peligrosos, otros muy peligrosos. En sus viajes conocen villanos, aliados, ciudades, mitos, pueblos atemorizados por una bestia (y, como todos sabemos y no os voy a revelar nada nuevo, si los protagonistas pasan por un pueblo atemorizado por una bestia, van a ir a por ella sí o sí). Cada parte, por mínima que fuese, de la aventura, me ha recordado al típico argumento de RPG. Y eso, si me conocéis, es un punto MUY a favor.

La parte de Claudia ha sido la más floja, pero no por ello ha sido mala. Quizás es la culpable de no estar más cerca del 10.

¿Algún fallo? Obviamente la historia no es perfecta. Flojea en algunas partes, y el final deja cosas en el aire (normal, teniendo una secuela), pero no le veo ningún fallo grave a tener en cuenta, pese a que hay mil libros mejores que él. Quizás los personajes, que están demasiado atados a clichés, son excesivamente planos y les falta personalidad. Attia ha sido mi favorita, precisamente por tener mucha personalidad. Sin embargo, no cambia un ápice en toda la aventura (como todos), y eso, en una situación tan límite como atravesar Incarceron, es poco creíble.

Como está excesivamente de moda últimamente, Incarceron contará muy próximamente con una adaptación cinematográfica. Aún recuerdo cuando las películas no estaban basadas en libros…

La secuela, Sapphique (el nombre se ha oído infinidad de veces en Incarceron, y aquí lo han traducido como Sáfico), ya ha salido hace unos años en Inglaterra, y saldrá en enero en Estados Unidos. Conociendo a Molino, viendo que no es de las editoriales que disfruten haciéndonos esperar, supongo que no tardaremos mucho en ver Sáfico en español. Mientras tanto, id abriendo boca con Incarceron, cuyo final es lo suficientemente cerrado como para no morirse esperando a Sáfico (de hecho, pese a que me encantó, no estoy –casi- nada impaciente por leer su secuela)

Lo mejor:

• El argumento, algo típico pero bueno.
• La mezcla de mis estilos favoritos, de una manera bastante buena.
• Aunque no enganche, consigue mantenerte interesado durante toda la lectura.

Lo peor:

• Los personajes, demasiado clichés y demasiado planos.
• Que nos toque esperar por la secuela, si no queremos leérnosla en inglés.
• Que, por mucho sobresaliente que se lleve, no alcance a llegar a nuestros corazones, como otros de sus compañeros: Los Juegos del Hambre y El Corredor del Laberinto.